Cuando Marcelino Hervios comenzó a manejar su taxi amarillo, hace más de treinta años, nunca se imaginó que la compra del medallón lo dejaría endeudado y con un futuro incierto.

"Yo pensaba ya jubilarme, rentar el medallón o venderlo de acuerdo a como estaba el mercado", comenta Hervios.

Pero atrás han quedado los días en que comprar un medallón de taxi amarillo era buen negocio, sobre todo por el límite en la cantidad de permisos.

Hoy, Hervios gana menos que cuando comenzó y se queja que sus clientes lo han abandonado por otras opciones como Uber.

"Hoy en día tenemos que trabajar seis... siete días. Por ejemplo, yo trato de trabajar siete días, a veces mi salud o el cansancio no me permite y me tengo que quedar en casa", explica Hervios.

Hace una semana Hervios tuvo un ataque de ansiedad y aunque su salud deteriora no puede dejar de trabajar: "El día que me quedo en casa, ya es el día más estresante para mí lo que estoy dejando de hacer".

Durante mucho tiempo, solo 13,000 taxistas amarillos podían operar en Nueva York. El medallón llegó a tener un valor de más de un millón de dólares pero, hoy en día, el precio no llega ni a $200,000 dólares.

Los choferes están desesperados por las deudas acumuladas.

Según la Comisión de Taxis y Limusinas que sólo en 2017, 52 medallones fueron embargados por falta de pago y 16 en lo que va de este año.

Pero no solamente la industria de los taxis amarillos es la que está en crisis. En los últimos 4 meses, cuatro choferes de taxi se suicidaron. Dos de ellos eran choferes de taxis de base.

Cira Ángeles de la Asociación de Dueños de Bases asegura que, tan sólo en febrero, 60 choferes de taxis livery han abandonado el negocio.

"Específicamente, cuando tienes que competir incluso con vehículos no regulados o con tablillas privadas y no existen leyes que protegen a este licenciado, que tiene que pagar el costo de hacer negocio y es un costo muy alto; entonces, no quisieramos ver que pasamos de homicidios de asaltos a suicidios", apunta Ángeles.

Hay más de 80,000 autos taxis Uber y esa cifra aumenta cada mes. Hervios espera que las autoridades nivelen las reglas para todos los taxis: "Que pongan un clima de prosperidad en la que todos podamos competir pero bajo las reglas de la ley que sean con paridad para todos".